domingo, enero 02, 2011

La carta que no envie..

Querido amigo ...

Muchas veces he querido decirte lo mucho que te estimo, lo que significas en mi vida, a la que llegas de una manera muy especial, por accidente, me ayudaste a controlar mi carácter, con tu conocimiento, con lo que viviste de alguna manera cambiaste mi manera de ver la vida y mi manera e enfocar mi mente.
Han pasado muchos años de ese momento, sin embargo aun tengo vivo cada instante en el que me enseñaste a vivir de acuerdo a un sistema, a una disciplina que me dio muchas satisfacciones que me hizo ser quien soy hoy en día,  esta persona cuando menos normal y no el vándalo que  decían que iba ser de adulto.
Gracias a tu enseñanza maestro, no solo de una escuela sino también de la vida en la que a veces es muy duro aprender y de eso se algo, tu marcaste un camino a seguir dentro del cual se tiene la satisfacción de vivir, aquel camino de trabajo y de la satisfacción de lograr los cometidos que te trazabas.
Aprendí de ti muchas cosas: muchas de las cuales me han servido para vivir si no con mucho dinero si con el suficiente para poder dar lo mejor de mi a mi familia y amigos, cada uno de ellos sabe quien fue el principal  promotor de esto;  así también saben lo mucho que siento tu partida, aunque no me lo dicen saben que estoy muy triste por que te fuiste antes de lo planeado.
Todos tenemos un final, unos antes que otros, pero tenemos que afrontar este hecho, amigos mios se han ido antes, muchos se irán después, pero sus huellas quedaran marcadas en cada uno de nosotros, máxime si esto fue una pauta e vida como lo hiciste tu maestro.
Te agradezco que halla podido estar contigo aprendiendo de ti, son pocos los maestros que han marcado mi vida, de los cuales eres el principal, porque no solo me diste tu conocimiento sino también  tu amistad, y demostraste la lealtad a tu disciplina con hechos no solo diciéndolo, cada uno de nosotros logro aquilatar lo que les enseñaste, cada quien llevara en su corazón la semilla que sembraste y eso te hará inmortal porque lo bueno siempre permanecerá, porque uno no muere cuando deja el cuerpo físico y rinde tributo a la tierra, sino cuando lo olvidan y personas como tu querido maestro no se olvidan siempre estarán presentes en nuestra vida y corazones.
Por eso te doy gracias por llegar a mi vida como un amigo pero sobre todo como un gran maestro que no solo enseñaba en la escuela sino también en la vida, una vida de seguir  tu ejemplo como muchos de los que  instruiste que te llevaran siempre con ellos, es por eso que acepto  tu partida; triste si pero con la esperanza de que algún día nos volveremos a ver para seguir aprendiendo juntos o para que me sigas enseñando no solo aspectos de la escuela sino también de la vida.

Atentamente JCMJ

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